Las Inspecciones Técnicas de Vehículos (ITV) evitan al año más de 133 víctimas mortales, cerca de 12.000 heridos de distinta consideración y, al menos, 17.700 accidentes de tráfico. Asimismo, se han evitado en Madrid, 406 muertes prematuras por exposición a contaminantes atmosféricos. Así lo asegura el estudio elaborado por el Instituto de Seguridad de Vehículos Automóviles “Duque de Santomauro” (ISVA) de la Universidad Carlos III de Madrid, “Contribución
de la Inspección Técnica de Vehículos a la Seguridad Vial y a la
protección de la salud de los ciudadanos y del medioambiente”.
El estudio afirma también que, si la totalidad de los vehículos que no acudieron a realizar la inspección obligatoria lo hubieran hecho, podrían haberse evitado al menos 8.800 accidentes, más de 7.000 heridos y 81 muertes adicionales.
Para llegar a estas conclusiones, el ISVA ha estudiado los datos de 2016
y ha evaluado el 20,28% de las 13.575.378 inspecciones técnicas
realizadas a nivel nacional en turismos; el 21,55% de las 969.867
realizadas en motocicletas y ciclomotores y el 6,68% del total de
inspecciones realizadas en los 3.374.714 vehículos ligeros destinados al
transporte de mercancías.
El análisis de los datos ha demostrado que los vehículos de mayor antigüedad presentan, para todo tipo de vehículos, mayor número de defectos. Así pues, se puede afirmar que, estadísticamente, son vehículos más inseguros y menos respetuosos con el medio ambiente. Por tipo de defectos graves, el capítulo de alumbrado y señalización es el que acumula mayor porcentaje de rechazos, seguido del de ejes, ruedas, neumáticos y suspensión.
Como novedad al informe que ya elaboró la Universidad Carlos III en 2012, el de este año incluye un interesante estudio de emisiones. En él se recoge que la cifra de muertes prematuras por exposición a contaminantes atmosféricos se ha reducido en 406 al año, aproximadamente. Si todos los automóviles hubieran pasado la ITV, podrían evitarse cerca de 80 muertes prematuras adicionales.
Fuentes de AECA-ITV –asociación independiente sin ánimo de lucro, integrada por la práctica totalidad de empresas privadas y públicas que prestan el servicio de ITV en nuestro país– comentan que la elaboración de este estudio viene motivada por la alarma social que provoca el incesante aumento del número de accidentes de tráfico (un 23% desde 2012 a 2016) y el impacto en la salud de los ciudadanos y en el medioambiente de los gases contaminantes que emiten los vehículos, y cómo contribuyen las ITV a la reducción de esas cifras, garantizando el correcto estado de mantenimiento de los mismos.
En términos económicos, las acciones encaminadas a reducir el número de víctimas suponen una contribución de la ITV a la seguridad vial de, al menos, 330 millones de euros.
Si los vehículos que no han pasado la inspección lo hubieran hecho, la
contribución se cifraría en 200 millones de euros adicionales.
La contribución económica por muertes prematuras evitadas por contaminación atmosférica se cifra en 485 millones de euros, más 90 millones de euros adicionales si todos los turismos pasasen la ITV.
En resumen, el beneficio social de la ITV se cifra en unos 815 millones de euros anuales, que podrían ser 290 millones más si se eliminase el absentismo. Recordemos que, actualmente, sigue dándose un alto nivel de absentismo. En torno al 20% de vehículos circulan sin tener la ITV vigente según los datos más recientes. Según las cifras de AECA-ITV, este comportamiento se da en el 17,71% de los casos en turismos particulares, en un 7,44% en camiones, un 52% de los casos en furgonetas, en un 21,20% de los autobuses, en un 58,89% de las motocicletas y en un 48,81% en el caso de los remolques.